Aquellos maravillosos años: Verano 95

Año 1995, segunda acampada de los Capuleto. En esta ocasión 8 tiendas de campaña y 3 tiendas canadienses. Respecto a la anterior acampada fuimos Charly, el de las pilas, Coco, el mayorquín, Cody, la jodiaputa, Kike, la machine, Javi, Cacaito y yo, el pringao. Se cayeron de la convocatoria Chus y Santi, pero a cambio entraron Mark Hitos, el Zuelle, y Mariano, el padrino. Número perfecto para un torneo de mus, de 4 parejas. ¿Ganador? Sólo se que yo no fuí, e invito al resto de los participantes a recordarmelo. Además cambiamos a Ochimin por el Phoskiflash. Otro punto importante, incrementamos el nivel de dificultad de la acampada: más botellas de alcohol y sin base operativa. El lugar escogido, nuevamente Asturias. La fecha, nuevamente Julio. En esta ocasión, yo, como máximo conocedor de los Picos de Europa (es que tengo un bisabuelo asturiano), organizé una ruta que comenzaba en el archiconocido camping de Arenas de Cabrales. Día 1: Arena de Cabrales-Puente Poncebos(6 Km), Poncebos-Caín (Ruta del Cares, 12 Km), Caín-Posada de Valdeón (7 Km), más uno más hasta el camping. Total 26 km cargados como mulos o mejor dicho como tontos. Me declaro responsable, y si no me planté fue porque era yo el gilipollas que lo había programado.

Día 2: recuperación del día anterior, en el camping de Posada de Valdeón y aligeramiento de equipaje, no estaba en los planes, pero después de la gran paliza,...y total, ibamos por libre. Día 3: Madrugón, autobús hasta el puerto de Pandetrave y camino rural hasta Fuente De. Suavecito, sobre todo en comparación con el primer día. Uno de los mejores momentos de la acampada, ya que como vecinos teníamos a un alemán, su novia, y la hermana de uno de ellos, que nos deleitó con un topless. Seguro que no fue la única "alemanita", esa noche si que plantamos las 8 tiendas de campaña. Día 4: muy a nuestro pesar dejamos a la alemanita y subimos por el teleférico de Fuente De hasta el mirador del Cable, y desde allí a patita hasta Horcados Rojos, de donde salía una vereda con un cable que descendía hasta un valle que atravesamos para llegar al Pico Uriellu. Una bajada increible, un día inolvidable. Los planes eran dormir en el refugio de la base, pero nuevamente modificamos nuestros planes, ya que aún era temprano cuando llegamos al destino, así que continuamos camino hasta el collado de Pandébano, donde hicimos acampada libre entre vacas y extraterrestres.

Día 5: Etapa final, descendimos hasta el pueblo de Bulnes, por un camino bastante incómodo por la cantidad de agua que recorría el camino, llegando con los pies mojados y con ampollas. De Bulnes continuamos bajando hasta Poncebos y de Poncebos a Arena de Cabrales, llegando nuevamente al Camping de esta población.

Días 6, 7, 8, 9 y 10: Al día siguiente cogimos un bus que nos llevó a Cangas de Onís, donde nos quedamos el resto de días, en el camping que se encuentra cerca del cruce que sube a Covadonga y Lagos. Ni que decir tiene que esos días descansamos, bebimos sidriña, comimos bién, hicimos el torneo de mus y subimos a tanto a Covadonga como a Lagos, donde por cierto, Mark Zuelle pinchó en el descenso.

Yo lo clasificaría como la mejor acampada de mi vida, e incluso uno de los mejores viajes que he hecho, y puedo decir que he viajado mucho. Y como reflexión personal puedo decir que he conocido muchas culturas, muchas arquitecturas, y muchas civilizaciones levantadas por el hombre que me han dejado huella, pero las experiencias que más me han marcado han sido las de contacto con la naturaleza: Asturias 95, Tanzania, Buceos,...