Tras muchos años de ausencia, este año ha vuelto la cita de Eurovisión. Ya, ya se que no ha faltado ningún año, pero es los Capuleto nos reuníamos el día de Eurovisión para celebrar el cumple de Betty, y siempre terminabamos viendo el festival. Este año no ha sido la celebración del cumple de Betty sino la boda de Merche y Wlad:

El caso es que allí estábamos todos los que pudímos viendo el Chikichiki, y animando al Chikilicuatre, y hacía mucho que no me reía tanto con Eurovisión. La actuación española me pareció divertidísima, si la canción no pasaba de graciosilla, la puesta en escena, el ambiente y el poco alcohol consiguieron algo que no me imaginaba. Cada voto lo festejamos como si fueran goles de la selección española, y a ver si no queda el Chikilicuatre mejor que los furgolistas. Ya podía poner MediaMark la misma oferta para Eurovisión que para el Europeo. La noche acabó con Chikilijavi tocando la guitarra a ritmo de Ian: